Con la mira puesta en las elecciones 2015, en la que aspira
llegar a la presidencia de la Nación, Scioli sigue ignorando el pedido de los
usuarios de la ruta, denominada también “ruta de la muerte”. La “Ola Naranja”;
la cantidad de carteles colocados en cada rincón de nuestra patria; el
patrocinio de autos de carrera; el marketing en ojotas, llaveros, bonitas
modelos, y tantas otras cosas más que suman millones y millones de pesos para
mantenerse en los primeros puestos de las encuestas, provocan irritabilidad en
la gente. Un párrafo aparte se merece el dinero dispuesto para los medios de
comunicación masivos a los que paga no sólo para que hablen bien de él, sino
también para minimizar realidades que prefiere ocultar.
El caso de la Ruta 88, que une a Necochea con Mar del Plata,
y beneficia directamente a otras ciudades como General Alvarado y Lobería,
además de las localidades que integran los cuatro Distritos, es uno de los que
afecta la buena libertad de expresión. Seguramente extorsionados con el retiro
de la publicidad oficial, muchos medios pequeños quedan atrapados en la
decisión de anunciar los reclamos de los vecinos, o cobrar a fin de mes el
anuncio pautado. También ha ocurrido con medios a nivel nacional, donde la
honestidad del periodista que divulgaba el accionar de los usuarios de rutas,
hizo que se sincere: “Muchachos, hasta aquí llegué yo… Me avisaron de la
dirección que les baje el pulgar porque corremos el riesgo de perder la pauta
de Scioli…”.
Con el respeto que se merece la investidura del señor
Gobernador, no es descabellado decir que Scioli miente. Lo hace en la
publicidad como la que llevó a Necochea para su cumpleaños, donde destacó un
tráiler con la leyenda “3.340 kilómetros de rutas repavimentadas para que
puedas recorrer”. Esto es una gran falacia, y
muy fácil de comprobar.
Con respecto al pedido de la autovía 88, impulsada por la
Unión de Usuarios Viales (UDUV) ante la pasividad de algunos intendentes,
varios concejales y muchos legisladores provinciales, es lamentable observar
cómo, hasta ahora, los intendentes de General Pueyrredón (Gustavo Pulti), Lobería
(Diana Argüello) e interino de Necochea (José Luis Vidal), con sus ausencias a
las audiencias públicas interdistritales que se realizaron y sin siquiera
enviar notas de excusación, dejaron al descubierto que prefieren trabajar para
el proyecto Scioli presidente antes que hacerlo por la gente que los votó para
estar en el lugar que ostentan.
Prefieren decir que el reclamo de la UDUV responde a algún
partido político de la oposición, sin ver que se trata de una asociación civil,
sin fines de lucro, conformada por ciudadanos comunes, que pueden o no tener
simpatías partidarias. El reclamo de la Unión de Usuarios Viales es político,
si se quiere hasta de Estado, pero lejos está de serlo político partidario.
Por último, la construcción de la Autovía 88 no es un
capricho. Es una promesa reiterada en tres ocasiones (todas en campañas
políticas), por el propio gobernador Daniel Scioli. La última fue el 19 de
Septiembre de 2011, cuando estuvo en el Cine Teatro París, apoyando la
candidatura a intendente de Horacio Tellechea. Entonces dijo “hemos estado trabajando en la reparación
de la ruta 88 pero no es suficiente, por eso queremos hacer una autovía, como
me lo ha pedido Tellechea, lo prometemos y lo vamos a cumplir”.
Como la promesa no se cumplió, el 21 de Noviembre venidero
tendrá lugar en el Concejo Deliberante de General Pueyrredón la Quinta
Audiencia Pública Interdistrital por el reclamo de la autovía 88.